Hace poco, en nuestro editorial nos complacímos de que la primavera es tiempo de festivales. Pues bien, los hay muy recientes, creados en tiempos de crisis con la finalidad de mantener viva la cultura popular, que cada vez más parece desterrada de los grandes medios de comunicación. Así es como el Festival del Títere de Cáceres, dirigido por Producciones Infantiles Miguel Pino, cumple su segundo año de existencia. No puede negarse que se trata de un festival modesto, pero en cambio da un gran ejemplo al proponerse que el dinamismo de la ciudad, su comercio y sus gentes, no decaigan. Enmarcado en el programa de las Fiestas de San Jorge y orientado sobre todo al público familiar, este fin de semana, actuarán cuatro compañías. Pueden ver el programa aquí.
Historias del camino, de la compañía Cristóforo Colombo, el espectáculo que abre este ciclo, es una historia sobre el placer del teatro contado con títeres y elementos del folclore tradicional, como máscaras y cabezudos. También actuarán Los Gorriones, con su 1, 2, 3… Imagina, un cuento en el que los niños van a participar en todo momento. Albero Teatro representará su S’Tupendo, en el que se presentan dos historias: «La flor del parque» «Las tartas del pastelero melero». Para cerrar esta segnda edición del Festival, se ha programado el clásico Pinocho, corazón de madera, de la compañía Okarino Trapisonda, en el que veremos qué sucede cuando un títere rompe sus hilos para ser persona.