Nos acaba de llegar la triste noticia de la muerte de Sebastià Vergés i Cadena. Una pérdida anunciada –se encontraba enfermo desde hacía ya un tiempo– pero no por ello menos sentida por la profesión. Desde Titeresante queremos dar el pésame a toda la familia y especialmente a su hijo y heredero en los títeres, Sebastià Vergés Martínez. Publicamos este texto que Adolfo Ayuso, gran amigo de los Vergés, ha escrito para despedir al gran maestro que nos ha dejado.
Sebastià Vergés i Cadena en plena manipulación. Foto de Jesús Atienza.
Sebastián Vergés i Cadena, nacido en 1929 en Barcelona, era el decano de los titiriteros del Estado Español.
A los 9 o 10 años ya se calzaba unos zapatos con alzas para llegar a la ventana del teatrillo de su padre, fundador de la saga de los Vergés, Sebastià Vergés i Prat. Participó en los inicios de la TVE con una serie de 28 capítulos de obras de titelles de guante rodadas en los estudios Miramar de Barcelona, junto a su hermano y su tío Antoni, bajo la dirección del padre que había tenido que dejar la manipulación por una grave fractura en ambas piernas.
Sebastià Vergés i Cadena con Panxito. Foto de Jesús Atienza.
Participó durante décadas en las funciones dominicales celebradas en el Pueblo Español y entre semana en la terraza de los antiguos Almacenes Jorba, así como en múltiples Fiestas Mayores de barrios y ciudades de Cataluña. Alegró las comuniones y cumpleaños de miles de niños de la buena sociedad catalana con las aventuras de Panchito, el cocinero negro (con alma de Pericu) que él inventó.
Sebastià Vergés contemplando la función de su hijo. Foto de Adolfo Ayuso.
Manipulador elegante y sobrio del títere catalán al que daba gracia y majestuosidad en sus evoluciones. Nunca lo agitó, más bien lo mecía. Excepcional sobre todo en las escenas finales de los bailes, donde sabía transmitir la esencia del movimiento. Algo que él tan bien sabía pues era un consumado bailarín. Hasta cerca de su muerte no dejó de asistir a una academia donde, más que alumno, él era maestro.
Cuando su hijo, Sebastià Vergés i Martínez, reactivó y refundó la compañía a mediados de los 70, volvió a ponerse al frente de los teatrillos junto a sus dos hijos, su esposa y sus dos nueras.
Sebatià vergés i Cadena recibe el «Premio a Toda una Vida» en el Parque de las Marionetas de Zaragoza. Con Idoya Otegui. Foto de Felipe Garduño.
Hombre de una gran modestia, era un archivo viviente de lo que fueron los titelles en Cataluña durante todo el siglo XX. Él y su hijo Sebastià me transmitieron buena parte de lo que he podido escribir sobre ellos. Por todo ello guardo agradecimiento y respeto para siempre. Sus conocimientos vividos han sido fuente también para otros investigadores y difusores de los titelles catalans que han situado, al fin, a los Vergés donde se merecen.
Estoy seguro que se ha ido bastante feliz. Haciendo lo que quería hacer pese a que la leucemia le obligaba a frecuentes transfusiones. Esos “chutes” le reactivaban y le volvían las ganas de ir a bailar. Y aunque él trabajaba más con “dimonis” que con angelitos ya habrá encontrado un lugar especial en un cielo especial destinado a los grandes titiriteros. Salut i bon viatge, maestro.
Muchas gracias por tus cariñosas palabras sobre mi padre. Él desde donde esté y yo también te lo agradecemos mucho.
Un fuerte abrazo!
Sebastià Vergés Martínez
ho sento moltissim la pérdida del vostre pare i molt bona persona
sempre el tindrém present.
una bona abraçada de la filla dén PIKART bon amic .
Aunque un poco tarde, pues me acabo de enterar, vayan aquí mis condolencias y mi abrazo titiritero para su familia en primer lugar y para todos titiriteros despues, pues estas perdidas son de todos. Salud