(Imagen del interior de La Bayka. Foto La Bayka)

Normalmente cuando escribimos los artículos para Titeresante el protagonismo lo tiene el espectáculo que hemos visto y no el espacio donde fue representando. Sin embargo, en esta ocasión me tomaré la licencia de hablar primero de La Bayka como espacio alternativo y emergente situado en Hospitalet de Llobregat.

Para mi desconcierto, no vimos la entrada de La Bayka al pasar por enfrente, y es que uno de los encantos de este nuevo lugar reservado a los títeres es que arrastra esa clandestinidad que te hace sentir exclusivo por el sencillo hecho de buscar una puerta con una campana que tienes que tocar para entrar.

interior de La Bayka. Foto La Bayka

Sus creadores Ola Muchin y Maurició Riobó nos dan la bienvenida con una sonrisa de oreja a oreja y el entusiasmo de recibir a parte de la familia titiritera en su casa. Vemos caras conocidas, personas cercanas a nuestro mundillo y por supuesto: estem a casa nostra.

interior de La Bayka. Foto La Bayka

Bayka respira cariño y voluntad por generar encuentros con el oficio del titiritero, con las artes gráficas, de crear vínculos entre las personas que necesitan tomarse el tiempo para producir un proyecto estético.

Por eso, no es lo mismo ver el espectáculo Manoviva de la conocida compañía italiana Girovago e Rondella en un teatro convencional, que ver su pequeño y encantador escenario en el salón de La Bayka. La experiencia cambia por diferentes razones, entre ellas, la libertad que se respira en el ambiente, la socialización que se genera en el tiempo de espera y la agradecida informalidad con la que nos presentan el espectáculo.

Manioviva. Foto Nik Palmer

Es como estar en el salón de tu casa viendo a unos titiriteros que han recorrido el mundo y ahora, están allí para ti y luego, podrás acercarte sin temor y darles un abrazo. Esa humanidad que te brinda el Espai La Bayka hace que quieras repetir y volver allí. Además, es imposible estar en este espacio sin recordar el Taller de Pepe Otal un lugar emblemático en Barcelona y que seguramente sirvió de inspiración a Ola y a Mauricio para crear su proyecto.

Dicho esto, no quiero dejar de decir, como tantas veces otros lo han dicho, que la compañía Girovano e Rondella se han ganado un espacio privilegiado entre los titiriteros gracias a su constancia y a su maravillosa técnica. Llegados a Barcelona después de participar en el Festival de Titelles al Cabanyal en Valencia, estos dos titiriteros nos obsequiaron su trabajo con generosidad y pasión.

Manioviva. Foto Nik Palmer

Toda la representación cautiva porque sus dos únicos personajes se muestran poco a poco, y a medida que los conocemos, se nos hacen más entrañables. Nos van descubriendo sus potencialidades dentro de la lógica de los títeres y lo naif pasa a ser fascinante por el modo como estos dos veteranos consiguen modular sus manos y hacer de ellas unos cuerpos con grandes capacidades histriónicas.

Manioviva. Foto Nik Palmer

Un fino sentido del humor también forma parte Manoviva, que nos conquista entre escena y escena por su sencillez y al mismo tiempo por su audacia.

Manioviva. Foto Nik Palmer

Deseo volver al Espai La Bayka con la ilusión de encontrar la calidad de un espectáculo como Manoviva, titiriteros que apoyan la iniciativa de generar nuevos públicos en espacios no convencionales, que nos motivan a estar allí, a crear y a disfrutar. Definitivamente, del Espai La  Bayka no salimos igual que como entramos. Gracias. 

Si os picado la curiosidad,  y queréis conocer La Bayka, este domingo podéis disfrutar de «Historia de un abrazo» de la compañía Dromosofista. Aquí el cartel y un pequeño adelanto: