(Dom Roberto, de Valdevinos. Foto MIMMOS
Terminó una edición más de MIMMOS, consolidándose como uno de los festivales culturales más dinámicos e incluyentes de la región. Con una programación diversa, el evento contó con la participación de varias compañías internacionales, que trajeron diferentes lenguajes artísticos para el público, enriqueciendo la programación y proporcionando momentos únicos.
El festival fue mucho más allá de los tradicionales espectáculos de títeres. Contó con una programación variada que incluyó talleres de construcción de títeres, cortometrajes de animación venidos de varias partes del mundo, lo que atrajo tanto a los fans del cine como de las marionetas.
Taller con los niños, a cargo de José Quevedo. Foto MIMMOS
Además, MIMMOS promovió actividades interactivas, como juegos para la familia a cargo de Ángeles de trapo (España) que envolvieron a todo el público de una forma lúdica, garantizando que el festival fuera un punto de encuentro intergeneracional. Hubo la animación, Lentalenda, com a compañía Marimbonda (Lousã, Portugal); su combinación de animación de calle y títeres ofreció una visión amplia de las posibilidades creativas de su universo visual y creativo.
Los Farra Fanfarra (Lisboa,Portugal) trajeron mucha música y animación en la abertura del festival, acompañados de un desfile de marionetas gigantes.
El grupo musical Fan Fanfarra. Foto MIMMOS
Los espectáculos fueron el corazón del festival, y mostraron la riqueza y diversidad de nuestra arte. Las compañías trajeron desde propuestas más tradicionales, como el teatro Dom Roberto por parte de la Compañía Valdevinos Teatro de Marionetas (Portugal), hasta creaciones contemporáneas que exploran el uso de máscaras y marionetas de forma innovadora, como la propuesta de Poisson Soluble (Francia), o la obra O2 (Oxígeno) del grupo PIA-Proyecto de Intervención Artística (Portugal), desafiando al público a pensar sobre temas universales como el ambiente, las emociones y el acto propio de contar historias.
Otras compañías como Periplo Marionetas (España), con su espectáculo Periplo Varieté y Caricata Teatro (Fafe, Portugal), con su Tourada animaron a la multitud que asistió al jardín de la Anta.
Trupe Fandanga. Foto MIMMOS
No podemos olvidarnos del teatro en miniatura de Trupe Fandanga (Porto, Portugal) que nos trajo el espectáculo Ornitóptero con sesiones que tenían una duración de 7 minutos, suficientes para que la micro-magia apareciera.
Cabe señalar que este año, MIMMOS dio un paso significativo rumbo a la inclusión y accesibilidad, al introducir el lenguaje de señas en algunos de los espectáculos e invitar a un grupo de invidentes para participar activamente en el festival. Esta iniciativa trajo una dimensión humana y social aún más profundo al evento, permitiendo que el público con necesidades específicas tuviera una experiencia enriquecedora y envolvente. Para el grupo de invidentes, la organización ofreció una oportunidad única antes de los espectáculos: pudieron tocar las marionetas y familiarizarse con sus texturas, formas y estructuras. Ese abordaje sensorial permitió que ellos crearan una imagen mental de los personajes y sus elementos narrativos, proporcionándoles una conexión más directa con el espectáculo que iban a oír. Además de eso, fueron introducidos a las historias que serían contadas, lo que facilitó la comprensión del contexto, enriqueciendo su experiencia teatral.
Imagen de ‘Le Poisson soluble’. Foto MIMMOS
La inclusión del lenguaje de señas en los espectáculos los abrió a un mayor público, garantizando que personas con deficiencia auditiva pudieran seguir las historias y se sintieran incluidas en las presentaciones de manera plena. La combinación de un arte visual como el teatro de títeres con el lenguaje de señas resultó una comunicación poderosa y accesible para todos.
Esas iniciativas demostraron el compromiso de MIMMOS con la inclusión, garantizando que todos, independientemente de sus capacidades, puedan disfrutar de la magia del teatro de títeres, máscaras y objetos. Además de enriquecer el festival, estás acciones promueven un mensaje fuerte sobre la importancia de la accesibilidad en la cultura y el arte.
En un balance general, MIMMOS 2024 fue un éxito, proporcionando momentos de magia y reflexión para las personas de todas las edades. La mezcla entre tradición e innovación, contando con la participación internacional y la diversidad de actividades paralelas, refuerza la importancia del festival en el calendario cultural de Sintra y de Portugal.
Fernando Cunha (director artístico da MIMMOS)
José Quevedo (tradução)