Fachada del Teatro La Gotera en Lazotea, en la calle Molino de Viento de Jerez de la Frontera (Foto M.ª José González de la Lastra)

Tenemos una buena noticia que celebrar: ha nacido un teatro para títeres en Jerez de la Frontera (Cádiz).

Una buena nueva para Jerez, para Andalucía, para España, para el mundo. El miércoles 2 de abril de 2025, a las 12 del mediodía, y con la presencia de las autoridades municipales encabezadas por la alcaldesa de la ciudad, de los jerezanos amigos de los títeres y de la prensa local, tuvo lugar la inauguración oficial del teatro “La Gotera de Lazotea”, situado en la calle Molino de Viento, en el barrio de San Miguel de Jerez. Digo inauguración oficial, porque esa misma mañana ya nos habíamos cruzado con la algarabía escolar de más de un centenar de criaturas que acababan de asistir a una función de títeres en el nuevo edificio. Construido ex novo para programar representaciones de teatro de títeres, la compañía jerezana que da nombre al teatro, fundada en 1981, ha volcado toda su experiencia –y, evidentemente, sus ahorros– para hacer realidad un teatro que satisface todas las necesidades que requiere el arte de los títeres.

La alcaldesa de Jerez habla en la inauguración del Teatro La Gotera en Lazotea (Foto M.ª José González de la Lastra)

Este acontecimiento supone un eslabón más en la larga cadena de la historia de los títeres en Jerez. Es bien sabido que el primer texto escrito conocido en nuestra lengua que incluye la palabra ‘títere’ aparece en un párrafo del acta capitular del cabildo municipal de Jerez de la Frontera de 8 de julio de 1513 (1). Dice así:

Títeres. Mandaron los dichos Sres. Pesquisidor e veinticuatros que sea notificado a los que hacen los juegos de los títeres, que luego se vayan desta cibdad e non los fagan más en ella, so pena de cient azotes.

Afortunadamente, los actuales munícipes son más permisivos que sus antecesores. Pero más allá de esta noticia reprobable, abundan otras que demuestran la longevidad del gusto del pueblo jerezano por la actividad titiritera. Así, en 1565, el titiritero Juan de Ujébar, propietario de un retablo, y Alonso de Vega, actor, se comprometen bajo contrato hacer, en Jerez y otros lugares, “la representación y muestra”, durante un año, de un Retablo de La Pasión de nuestro Redentor Jesucristo escrito por el segundo de ellos (2). Se sabe que en Jerez hubo funciones de máquina real y volatines en la casa de comedias entre el 22 de marzo y el 9 de julio de 1692; el maquinista se llamaba Cristóbal Damen (3). El periódico El Guadalete (18/04/1890) también da noticia de representaciones de volatines y máquina real en marzo de 1715. Y en 1752, está documentado que hubo actuaciones de títeres en el convento de San Juan de Dios (4).

Anuncio del Teatro de Figuras Humanas, de marionetas (30/04/1941, Ayer, Jerez de la Frontera)

Durante el siglo XIX pasaron varias veces por Jerez compañías tan importantes como las de Isidoro Narbón, representando su famoso Nacimiento:

TEATRO ECHEGARAY.- / FANTOCHES ESPAÑOLES. / Gran función para hoy, a las siete y media de la noche, desempeñada por figuras mecánicas. / Estreno del auto sacro en 5 actos y en verso, cuyo título es / Las astucias de Luzbel o la venida del Mesías / en la que se exponen 19 magníficas decoraciones. / Entrada principal, 4 rs. Grada baja, 2 reales.

o la no menos famosa comedia de magia Marta la hechicera (5).

El siglo XX comenzó con la llegada del teatro de la Tía Norica a Jerez. En 1904 ya publicaba la prensa jerezana la posibilidad de que el nuevo empresario de la Norica, Luis Eximeno Chaves instalara en la ciudad su teatro desmontable tras finalizar la “feria del frío” gaditana. Costumbre que seguirán sus sucesores: Manuel Martínez Couto (en 1934 su barraca estuvo en Jerez desde el 9 de mayo hasta el 29 de julio) y Joaquín Rivas Saenz (6). 

En 1932, el Ateneo de Jerez organizó una excursión a Sevilla para asistir al estreno nacional de la obra para títeres La pájara pinta, del joven poeta Rafael Alberti, con música de Federico Elizalde y decorado del pintor de vanguardia Pablo Sebastián (7). Tras la Guerra Civil siguieron pasado por Jerez las compañías de marionetas más importantes del momento: Rosana-Picchi, en el Teatro Villamarta (8) y el Teatro Muñecos Humanos, de De Franceschi, ambas en 1941 (9) o “Herta Frankel con sus marionetas”, dentro de los espectáculos de la compañía de “Los vieneses”, en 1950 y 1951, cuando aún no existía la televisión que le dio la fama (10).

No quisiera olvidar en este ligero repaso de la historia de los títeres en Jerez a un ilustre hijo de la ciudad gran amante de los títeres: Carlos Aladro Durán, artífice de la salvación y vuelta de la Tía Norica a los escenarios en 1974 y autor de un hermosísimo libro que ha ayudado de manera esencial a la salvaguarda del espíritu del popular títere gaditano.

Son sobre estos cimientos sobre los que se levanta el nuevo teatro; es este sustrato nutricio el que ha alimentado a la compañía “La Gotera en Lazotea” en su incansable labor a favor del arte de los títeres. La prueba está en los innumerables espectáculos montados desde 1981; en el Festival Internacional de Títeres de Jerez (1994-2023) y El Jardín de Berta (2010-2024) que ha permitido a los jerezanos el disfrute de los mejores espectáculos; en su labor investigadora sacando a la luz la figura del hasta entonces totalmente desconocido titiritero de “cristobitas” Antonio Durán Márquez (11); y, ahora, en la construcción de un teatro para que los títeres se desarrollen a sus anchas. Véase, para comprobarlo con detalle, el artículo que le dedica la revista Fantoche en su número 18.

Situación del Teatro La Gotera en Lazotea en la orografía del barrio de San Miguel

El teatro de “La Gotera en Lazotea” es algo más que un espacio perfectamente dotado para su función. Tiene mucho de símbolo en estos tiempos que corren. Su propia localización esta cargada de significados. Su barrio, de San Miguel, es uno de los más castizos de la ciudad; cuna de Lola Flores, entre otros muchos flamencos de renombre que lo habitaron y siguen habitando. La calle Molino de Viento, donde se levanta, se llama así porque en su tiempo allí giraban las aspas del ingenio que le prestó su nombre; no en vano, justo en el solar del teatro, está el punto más alto de la orografía jerezana. La antigua casa que ocupaba el espacio del teatro era conocida popularmente como la “casa del agua”, ya que en ella manaba una fuente en la que los vecinos saciaban su sed. Viento, agua, duende, molino; ecos de hazaña quijotesca…

La mañana de la inauguración, para poder acceder a la calle del teatro, fue necesario pasar por un estrecho pasillo que dejaba el cercado de los restos de una casa –tierra, vigas, piedras– que las aguas abundantes de este invierno desbordado en primavera habían abatido sobre la vía pública días antes. El pensamiento fue inevitable: cae una casa vieja, en su abandono; mientras nace un teatro de títeres, cargado de esperanzas.

¡Qué soplen venturosos los aires para el teatro de “La gotera en lazotea”! ¡Qué la frescura de sus aguas contribuya al bienvivir de los jerezanos sedientos de cultura! ¡Larga vida a los títeres de Jerez!

NOTAS

1 Archivo Municipal de Jerez, libro nº 8, folio 330, Acta del 8/7/1513. El dato fue publicado en Antonio Fernández Formentari, Costumbres y Leyendas de antaño, Jerez de la Frontera, Impr. Guadalete, 1890, p. 10; prácticamente a la vez que en El Guadalete: periódico político y literario: Año XXXVI Número 10436 – 1890 marzo 18), p. 1.

2  APNJF, Luis de Huertas, Ofº. 14, 26 de noviembre de 1565, ff. 968r-969v. El documento fue publicado por Juan Salguero Triviño en su tesis doctoral El teatro y la fiesta parateatral en Jerez de la Frontera durante los siglos XVI y XVII. Fuentes documentales (Piedad Bolaños Donoso, dir., Universidad de Sevilla, 2014, pp. 566-568; así como en La casa de las comedias y la actividad teatral en Jerez de la Frontera durante el siglo XVII, Sevilla, Editorial Universidad de Sevilla, 2016, pp. 140-144) aunque sin identificar que se trataba de una representación con títeres.

3 Salguero, La casa…, pp. 288-290.

4 Manuel Ruiz Lagos, Controversias en torno a la licitud de las comedias en la ciudad de Jerez de la Frontera: años 1550-1825, Jerez de la Frontera Centro de Estudios Históricos Jerezanos, 1964, p. 61.

5 23 de diciembre de 1884 y 12 de septiembre de 1893, El Guadalete, Jerez de la Frontera.

6 Desirée Ortega Cercas, Historia crítica y revisada de La Tía Norica de Cádiz [en línea], Ramón Espejo Romero, dir. Tesis doctoral. Universidad de Sevilla. Dpto. de Literatura Inglesa y Norteamericana. 2016 https://idus.us.es/handle/11441/39815 [15/09/2022], pp. 183-190.

7 2 de noviembre de 1932, El Guadalete, Jerez de la Frontera.

818 y 23 de febrero de 1941, Ayer, Jerez de la Frontera.

9 29 de abril al 2 de mayo de 1941, Ayer, Jerez de la Frontera.

10 8 y 30 de mayo de 1950 y 31 de mayo de 1950, Ayer, Jerez de la Frontera.

11  Benito, Juan Manuel, “[Investigación sobre] Don Cristóbal”, Bululú 0, (verán 2001), pp. 76-79 y 96-98.